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Ni demasiado caliente, ni demasiado frío. Simplemente perfecto, y has encontrado el clima ideal para cultivar cannabis. El clima es mucho más que solo la temperatura. La humedad, el viento y muchos otros factores contribuyen a las condiciones climáticas generales que afectan el crecimiento de tus plantas. Acertar con el clima es clave para obtener una gran cosecha con cogollos cubiertos de tricomas. Tenemos las mejores semillas de cannabis para cultivar cannabis de alta calidad. Ahora, te toca a ti brindarles las mejores condiciones climáticas para que prosperen en plantas de cannabis. Las plantas de cannabis son seres vivos que requieren las condiciones adecuadas para crecer. Encontrar el clima ideal es esencial para un cultivo exitoso.

Diferentes Factores Climáticos a Considerar al Cultivar Cannabis

Los cultivadores de interior y exterior deben tener en cuenta el clima al cultivar cannabis. El clima natural es lo que experimentamos al aire libre: la temperatura, el viento, los niveles de humedad, etc. El mejor clima para el cultivo de cannabis son temperaturas cálidas y abundante luz solar. Las condiciones climáticas favorables en exteriores dependen de tu ubicación y la estación. Si estás cultivando en una zona con malas condiciones meteorológicas, descubre cómo obtener una buena cosecha con estos consejos. El clima también afecta el cultivo de cannabis en interiores. En lugar de usar elementos naturales, los cultivadores pueden recrear diferentes condiciones climáticas con su equipo de cultivo. En interiores, los cultivadores tienen más control sobre el clima, lo que les permite personalizar las condiciones óptimas en cada etapa de crecimiento.

Varios factores contribuyen al clima general en el que crece tu planta. Considera estos elementos al explorar el control del clima en tu configuración de cultivo en interiores:

Temperatura

La mejor temperatura para cultivar cannabis siempre será un tema de debate. La temperatura óptima está influenciada por el tipo de cepa de cannabis, la etapa de crecimiento y la calidad deseada. La temperatura es una parte esencial del clima que puede mejorar o dañar tu cultivo.

Monitorea la temperatura de tu sala de cultivo en cada etapa del proceso de crecimiento. Encuentra el punto ideal, y tu planta crecerá grande y producirá muchos cogollos. Experimentar con la temperatura puede provocar fenómenos únicos, como plantas moradas y más tricomas a temperaturas más bajas. ¡Pero ten cuidado! Las temperaturas demasiado altas o bajas pueden dañar tu planta, limitando su tamaño, restringiendo el crecimiento de cogollos o atrayendo enfermedades.

Humedad

Los niveles de humedad determinan cuánta humedad hay en el aire alrededor de tu planta de cannabis. Exponerla a más o menos humedad puede afectar su salud general. Altos niveles de humedad en las primeras etapas facilitan la absorción de agua a través de las hojas mientras las raíces se desarrollan. Reducir drásticamente la humedad en la etapa de floración puede fomentar la producción de terpenos y tricomas. Las plantas interpretan esto como una señal de que se aproxima una temporada fría, acelerando su proceso de maduración.

Los niveles de humedad desfavorables pueden tener efectos negativos en la salud de tu planta. La alta humedad es una causa común de moho y pudrición de cogollos.

Circulación de Aire

El viento y el aire cumplen varias funciones en el cultivo de cannabis. Ayudan a regular la temperatura y afectan los atributos físicos de la planta. Para cultivos en interiores, el viento se simula mediante ventiladores y un sistema de ventilación. Una buena circulación de aire durante la cultivación ayuda a filtrar el olor y mantiene la planta fresca durante el ciclo de luz. También previene el desarrollo de moho y otras partículas debido a la baja circulación de aire.

Usa la circulación de aire con moderación. Si demasiado aire sopla sobre la planta, puede doblar las ramas, haciendo que no puedan soportar un crecimiento considerable de cogollos.

Precipitaciones

Los cultivadores al aire libre en áreas con el clima ideal para el cannabis se benefician de los patrones de precipitación natural. Los cultivadores en interiores pueden simular la lluvia mediante la cantidad y frecuencia con la que riegan las plantas. Las precipitaciones aportan el ingrediente más vital para cultivar cannabis: agua.

Las mejores condiciones de riego proporcionan suficiente agua para saciar la sed de la planta sin ahogar las raíces. Cuanto más crece la planta, más agua necesita. Proporcionar muy poca agua dejará a la planta con deficiencia y sin poder madurar completamente. Demasiada agua puede causar moho, hongos o frenar el crecimiento.

Altitud

“¿Qué tan alto?” no es solo una famosa película de culto, también es una pregunta importante antes de cultivar cannabis. La altitud influye en el clima general de un lugar. La altitud variable afecta la exposición a los rayos UV, las temperaturas y más. Ámsterdam y otras regiones globales a una altitud moderada tienen el clima ideal para el cannabis debido a los niveles de luz solar, humedad y temperatura. Las temperaturas más frescas en altitudes elevadas pueden aumentar los tricomas. Los cultivadores en interiores pueden ajustar la cantidad de rayos UV para simular diferentes altitudes. El clima está en tus manos al cultivar cannabis. Crea el clima ideal para tu configuración de cultivo, y nuestras semillas de cannabis de alta calidad producirán rendimientos elevados.

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